Capaz de Dios

«La Voz de San Justo», domingo 4 de junio de 2023

“Como modelo de lenguaje de IA, no tengo la capacidad de creer o no en la existencia de un ser superior llamado Dios.” Es la respuesta a la pregunta por la existencia de Dios de una aplicación de inteligencia artificial. Es correcta. Con sus enormes recursos, la inteligencia artificial no puede afirmar o negar la existencia de Dios.

El que sí es “capaz de Dios”, según la feliz expresión de la tradición cristiana, es el ser humano, habitado precisamente por el deseo de Dios. No solo su inteligencia, sino también su voluntad, su afectividad, sus pulsiones interiores más humanas y hondas. Todo en el ser humano es tensión hacia Dios.

La fe cristiana nos dice que Dios, misterio siempre inefable, ha salido al encuentro del hombre que lo busca. Se ha mostrado libremente, dejándose encontrar y tendiendo la mano a su criatura. Y busca una respuesta similar: personal y libre.

El encuentro con Dios solo puede darse en ese espacio generoso (y también riesgoso) que es la libertad. Ahí sí que hay capacidad de Dios. Jesús lo dirá así: “Felices los que tienen el corazón puro, porque verán a Dios.” (Mt 5, 8). Los humildes, los mansos, los pequeños, los que no tienen doblez son “capaces de Dios”.

“Buscamos tu Rostro, Señor. En tu creación percibimos los destellos de tu belleza. En el corazón sentimos latir el deseo de tu mirada, que intuimos serena y pacificadora.

Solo al mirar la cruz comprendemos quién eres, Trinidad santa: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Amor, misericordia y compasión.

Dios misterioso y cercano, trascendente y amigo; tres veces santo, manso y humilde. Verdad que no engaña, sino que ilumina y consuela. Misterio santo que habitas en el alma de tus hijos.

Ante tu Presencia nos postramos, cantando y entregándonos confiados. Amén»

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.